Buenas,
que fin de semana más lluvioso estamos teniendo, sin poder aprovechar las prestaciones abueliles en cuanto a zonas de recreo y esparcimiento. O dicho en román paladí, con la lluvia de las narices no estamos pudiendo salir a jugar al jardín, je, je. Esto es broma, dado que me encanta la lluvia, aunque con niño la verdad que es un poco más rollo.
He notado que el blog está teniendo un descenso de visitas brutal (ya sabeis que me encantan las estadísticas estas chorras). Y lo más curioso que el día que más visitas ha recibido el blog fue uno de esos que llevaba mogollón sin actualizar. Y ahora que vuelvo a hacerlo, nadie lo lee. Mejor, así queda la cosa más en familia. Que se que una prima mía, si, esa que se va a vivir a Azuqueca, lee el blog ;-)
Bueno, resulta que a pequeñito ahora le ha dado por soltarse a hablar. Como el típico lorito de repetición, y es super gracioso. Su última adquisición es "papeeeeeiiii" que no significa nada, pero que le respondo yo "Bebeeeeeiiiiii" y nos mondamos de la risa. La versión "mameeeeeiiii" aún no ha llegado, pero todo se andará. Ahora mismo está la niña peleando para dormile y le estoy escuchando (por el interfono) que no quiere y está charlando. A ver si le grabo la voz, que es más dulce que el merengue de los ángeles.
Ayer me pasó una cosa que ya se está convirtiendo en habitual y me preocupa un poco (algo más tras la peli que vi ayer). Y es que está tan tranquilo y de repente se asusta muchísimo y se viene al regazo. Antes era algo anecdótico, pero ya me empieza a preocupar un pelín. Es que ayer estábamos sentados al lado, se dió la vuelta como para subir un escalón y saltó encima mio totalmente acojonado. No se, a ver si se lo preguntamos a la pediatra, que no se que pasa. En la peli de ayer es que el bebé veía muertos, cosa que no es, pero que da bastante canguele.
Por cierto, la pediatra nos dijo que teniamos ya que ir dandole leche de vaca normal, dejar los biberones y demás. La verdad que no me quedó nada claro el por qué. Para empezar, la leche esta adaptada yo creo que es lo mismo, pero más adecuada. Además, el biberón es una cosa muy cómoda. Nos dijo que se le deformaba la mandíbula, pero no me cuadra demasiado. Eso lo entiendo, y lo he leido, para los chupetes, pero el biberón lo chupa unos poquísimos minutos. En fin, ya veremos qué hacemos.
Bueno, y esto es lo que se me ocurre en una lluviosa mañana de domingo.
Besitos.
que fin de semana más lluvioso estamos teniendo, sin poder aprovechar las prestaciones abueliles en cuanto a zonas de recreo y esparcimiento. O dicho en román paladí, con la lluvia de las narices no estamos pudiendo salir a jugar al jardín, je, je. Esto es broma, dado que me encanta la lluvia, aunque con niño la verdad que es un poco más rollo.
He notado que el blog está teniendo un descenso de visitas brutal (ya sabeis que me encantan las estadísticas estas chorras). Y lo más curioso que el día que más visitas ha recibido el blog fue uno de esos que llevaba mogollón sin actualizar. Y ahora que vuelvo a hacerlo, nadie lo lee. Mejor, así queda la cosa más en familia. Que se que una prima mía, si, esa que se va a vivir a Azuqueca, lee el blog ;-)
Bueno, resulta que a pequeñito ahora le ha dado por soltarse a hablar. Como el típico lorito de repetición, y es super gracioso. Su última adquisición es "papeeeeeiiii" que no significa nada, pero que le respondo yo "Bebeeeeeiiiiii" y nos mondamos de la risa. La versión "mameeeeeiiii" aún no ha llegado, pero todo se andará. Ahora mismo está la niña peleando para dormile y le estoy escuchando (por el interfono) que no quiere y está charlando. A ver si le grabo la voz, que es más dulce que el merengue de los ángeles.
Ayer me pasó una cosa que ya se está convirtiendo en habitual y me preocupa un poco (algo más tras la peli que vi ayer). Y es que está tan tranquilo y de repente se asusta muchísimo y se viene al regazo. Antes era algo anecdótico, pero ya me empieza a preocupar un pelín. Es que ayer estábamos sentados al lado, se dió la vuelta como para subir un escalón y saltó encima mio totalmente acojonado. No se, a ver si se lo preguntamos a la pediatra, que no se que pasa. En la peli de ayer es que el bebé veía muertos, cosa que no es, pero que da bastante canguele.
Por cierto, la pediatra nos dijo que teniamos ya que ir dandole leche de vaca normal, dejar los biberones y demás. La verdad que no me quedó nada claro el por qué. Para empezar, la leche esta adaptada yo creo que es lo mismo, pero más adecuada. Además, el biberón es una cosa muy cómoda. Nos dijo que se le deformaba la mandíbula, pero no me cuadra demasiado. Eso lo entiendo, y lo he leido, para los chupetes, pero el biberón lo chupa unos poquísimos minutos. En fin, ya veremos qué hacemos.
Bueno, y esto es lo que se me ocurre en una lluviosa mañana de domingo.
Besitos.