Buenas,
ya han pasado las fiestas, las vacaciones, y la nevada que propició que mi madre sacase el trineo que tiene de alta montaña y despeñase a los peques ladera abajo. La sensación (no de la nevada) ha sido agridulce en estas fiestas. Por un lado, ha estado fenomenal y lo hemos pasado genial, pero problemillas familiares nos han chafado bastante, con lo que agridulce, como en los chinos.
El otro día estuve rescatando mi colección de cedeses, vilipendiada por los emepetreses, y estoy más contento que mis peques con la avalancha de regalos que les han traído los reyes. Hace muchos años decidí que tenía muchos cedés, y los metí en carpetas, junto con el libreto, y las cajas las guardé en el trastero. Y ahora he hecho el control Z. Ciertamente, será más limpia ahora la música, tendrás alcance a cualquier tema estés donde estés, pero el ritual de buscar por la estantería un álbum, meterlo en el lector y revisar el libreto, no se consigue con tantas modernidas. Dije lo mismo en su día con los discos, es cierto.
Como dicen los finos, now playing "Por el centro" de los Mártires del compás, del disco "Mordiendo el duende". Cito textualmente "Como dice mi amiga Amalia, ahora que está dentro, dale movimiento, ahora que está dentro, dale movimiento". Me encanta.
Estaba Carmen jugando con dos muñecos de nieve que llevamos a la guarde para el árbol, que nos han devuelto hoy, y ha dicho "se quieren mucho", mientras juntaba a los dos muñequitos. He tenido que bajar al garaje a por los palos del sombrajo, que los he perdido tras semejante shock. Por cierto, hablando de traumas, se nos ha pegado un porrazo hoy Pablo contra una esquina en una tienda que tiene media cara marcada. No ganamos para golpes, máxime viendo a nuestra Edurne Pasabán colgada de las escaleras.
Al salir del cole, que ayer no tuvieron por que casualmente se rompió la calefacción el dia de más frio en la historia del pueblo, traía Pablete el menú bimestral, que paso a citar el de la semana.
- Lunes -> Lentejas guisadas, ensalada, fruta, leche y pan.
- Martes -> Puré de verduras, garbanzos salteados, fruta, leche y pan,.
- Miércoles -> Macarrones al queso, tortilla con lechuga y tomate, fruta y pan.
- Jueves -> Judías verdes, ensalada variada, yogur y pan.
- Viernes -> Patatas estofadas, menestra, fruta y pan.
Por cierto, el otro día dijo Pablo, "me encanta el brócoli y los guisantes, umm, que ricos". Si es que es saber darle el toque "Tribu del tofu" para los paladares más exigentes.
Para terminar, dos anécdotas. Estando en la piscina un día de estos con Pablo, en una especie de yakuzi, se me acercó una niña de tres años, se me subió a las rodillas y se puso a dar saltos. No se que las doy, de verdad. Más rica la peque. Los padres claro, no sabía donde meterse, y es que cuando uno tiene cara de bueno, le pasan estos temas. Lo otro que iba a recordar es que fuimos al cine, a ver "Alvin y las ardillas, 2", con el doble de ardillas, oiga. Además de salir de la sala llamando a Pablo, Pablin, y diciéndole que si quería nueces, para provocar sus risas, nos pasó algo buenísimo. Empieza la película y al minuto, se para (como que se había estropeado) y encienden las luces del cine. Me mira y me dice "Ha sido una peli corta". Jajajaja, así me gusta, conformista por naturaleza.
Besitos.