Buenas,
la semana ha terminado y podemos decir que he pasado un grandísimo fin de semana, por multitud de motivos que voy a desgranar con la gracia y el desparpajo que me caracteriza. O por lo menos lo voy a intentar, que ya es algo.
El sábado fuimos al restaurante Shi-Shang. Este fue el sitio elegido para la kedada vegetariano del foro a la que no pude ir. Es un restaurante vegetariano bufete de comida asiática, enclavado muy cerquita de la plaza de Callao de Madrid. Nada más entrar tienes la línea de comida, con lo que puedes ver de qué va. Me comí 4 platos de primeros y 2 de postres, y no os creáis que me quedé del todo lleno. Una pareja oriental que estaban sentado a nuestro lado me miraban y exclamaban "Es un saco sin fondo", no os digo más. ¿La comida? A ver, a ver. No es que sea una delicatesen continua, tienen muchas cosas que no pegan ni con cola, y en particular probé una cosa que sabía a turrón y estaba malísima. Pero el poder comer hasta reventar, de todo lo que había, y encontrar cosas riquísimas para un vegetariano no tiene precio (bueno, si, 11 euros más la bebida). En concreto el arroz tres delicias combinado con una especie de cerdo agridulce me encantó.
¿Mi veredicto? Si lo tuviera cerca del trabajo comería una vez por semana allí, dado que es un poco caro para todos los días. Además, que me pondría más gordo que Totoro ;-) A la niña no le gustó mucho. Yo lo recomiendo para vegetarianos, aunque hay que tener cuidado con lo que coges. Por cierto, el gazpacho que anuncian no lo probé, se me pasó.
Cambiando el tercio, ayer probamos dos de las clases de salchichas que tienen en mi querida tienda inglesa (a la que haremos una visita, que me han tocado 60 aurelios en la primitiva). Las primeras, unas salchichas blancas de la sección de refrigerados no nos gustaron nada. Yo me las comí por que soy como el camión de la basura, que no degusto, pero la niña las dejó. Las otras eran las congeladas de Mc Carney. El aspecto de estas últimas es pelín feo, como si estuvieran mal hechas. De sabor, no os creais que me gustaron, dado que me recordaba al paté, pero a la niña si que le gustaron. El precio no lo recuerdo. Y eso es todo en cuanto a comida.
Este fin de semana lo hemos pasado en casita los tres (cuatro) en familia, sin ir a visitar a nadie. He disfrutado mogollón, y lo hemos pasado auténticamente genial. Hemos visto películas (y Pocoyos para aburrir), hemos jugado con la piscina de bolas, con las construcciones, con los coches, etc. Además que hemos podido dormir. Genial desde todo punto de vista. Por no aburriros y que no os suba el azucar, os cuento la anécdota vegetariana. A raiz del artículo que decía que los niños no comen naranjas, le dí el domingo una a Pablo (los plátanos y las peras se los come de dos en dos, os lo juro). Total, que nos la comimos a medias. Al principio la chupaba y le gustaba mucho. Hasta que le dió un mordisco. Pobrecito mio, que cara de asco. Estaba acidilla la jodia, pero es que era la única que tenía. Creo que tendremos que volver a probar en otra epoca, que estén más dulces.
Bueno, y esto es todo lo que tenía. Para mañana hablaremos de una escena de la película "Mizmy, más allá de la imaginación".
Besitos.
P.D: Se cascó el Pablo un cocido el domingo que no se lo salta un gitano con pértiga. Y el sábado mi madre me dijo "¿Cómo le vas a a dar segundo plato?" No sólo segundo plato, si no que tomó postre y vaso de leche. Sale más rentable comprarle un traje, desde luego.
P.D.2: Que el sitio tiene web, que se me había pasado!!! www.shishangrestaurant.com
la semana ha terminado y podemos decir que he pasado un grandísimo fin de semana, por multitud de motivos que voy a desgranar con la gracia y el desparpajo que me caracteriza. O por lo menos lo voy a intentar, que ya es algo.
El sábado fuimos al restaurante Shi-Shang. Este fue el sitio elegido para la kedada vegetariano del foro a la que no pude ir. Es un restaurante vegetariano bufete de comida asiática, enclavado muy cerquita de la plaza de Callao de Madrid. Nada más entrar tienes la línea de comida, con lo que puedes ver de qué va. Me comí 4 platos de primeros y 2 de postres, y no os creáis que me quedé del todo lleno. Una pareja oriental que estaban sentado a nuestro lado me miraban y exclamaban "Es un saco sin fondo", no os digo más. ¿La comida? A ver, a ver. No es que sea una delicatesen continua, tienen muchas cosas que no pegan ni con cola, y en particular probé una cosa que sabía a turrón y estaba malísima. Pero el poder comer hasta reventar, de todo lo que había, y encontrar cosas riquísimas para un vegetariano no tiene precio (bueno, si, 11 euros más la bebida). En concreto el arroz tres delicias combinado con una especie de cerdo agridulce me encantó.
¿Mi veredicto? Si lo tuviera cerca del trabajo comería una vez por semana allí, dado que es un poco caro para todos los días. Además, que me pondría más gordo que Totoro ;-) A la niña no le gustó mucho. Yo lo recomiendo para vegetarianos, aunque hay que tener cuidado con lo que coges. Por cierto, el gazpacho que anuncian no lo probé, se me pasó.
Cambiando el tercio, ayer probamos dos de las clases de salchichas que tienen en mi querida tienda inglesa (a la que haremos una visita, que me han tocado 60 aurelios en la primitiva). Las primeras, unas salchichas blancas de la sección de refrigerados no nos gustaron nada. Yo me las comí por que soy como el camión de la basura, que no degusto, pero la niña las dejó. Las otras eran las congeladas de Mc Carney. El aspecto de estas últimas es pelín feo, como si estuvieran mal hechas. De sabor, no os creais que me gustaron, dado que me recordaba al paté, pero a la niña si que le gustaron. El precio no lo recuerdo. Y eso es todo en cuanto a comida.
Este fin de semana lo hemos pasado en casita los tres (cuatro) en familia, sin ir a visitar a nadie. He disfrutado mogollón, y lo hemos pasado auténticamente genial. Hemos visto películas (y Pocoyos para aburrir), hemos jugado con la piscina de bolas, con las construcciones, con los coches, etc. Además que hemos podido dormir. Genial desde todo punto de vista. Por no aburriros y que no os suba el azucar, os cuento la anécdota vegetariana. A raiz del artículo que decía que los niños no comen naranjas, le dí el domingo una a Pablo (los plátanos y las peras se los come de dos en dos, os lo juro). Total, que nos la comimos a medias. Al principio la chupaba y le gustaba mucho. Hasta que le dió un mordisco. Pobrecito mio, que cara de asco. Estaba acidilla la jodia, pero es que era la única que tenía. Creo que tendremos que volver a probar en otra epoca, que estén más dulces.
Bueno, y esto es todo lo que tenía. Para mañana hablaremos de una escena de la película "Mizmy, más allá de la imaginación".
Besitos.
P.D: Se cascó el Pablo un cocido el domingo que no se lo salta un gitano con pértiga. Y el sábado mi madre me dijo "¿Cómo le vas a a dar segundo plato?" No sólo segundo plato, si no que tomó postre y vaso de leche. Sale más rentable comprarle un traje, desde luego.
P.D.2: Que el sitio tiene web, que se me había pasado!!! www.shishangrestaurant.com
3 comentarios:
dale una mandarina al niño, malaje!
que es más chiquita y dulce.
mira, otro orgulloso papá vegetariano:
http://vegandad.blogspot.com/
besos, familia
Me apunto el restaurante, a ver si voy este fin de semana!
El gazpacho tiene buena pinta, aunque me suele parecer demasiado fuerte! Pena que no lo hayas probado para orientarnos!!
aleeeeeeee, has ido sin nosotros!! que cacho tramposo, jajaja, te vas a enterar tú lo que vale un peine....
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